Cada vez aumenta más la tendencia a la obesidad y al sedentarismo en la juventud, este estilo de vida genera, a futuro, hipertensión y enfermedades cardiovasculares. Las distintas maneras de abordarlo, crear conciencia familiar y social fueron tratadas en el V Simposio Cuyano de enfermedad cardiovascular en la mujer.
Por Silvina Castro
Para Todo Salud
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La recomendación
médica es realizar los controles necesarios
desde la niñez con el pediatra de cabecera, controlar la talla, el peso y la
presión arterial para asegurarse de que todo esté en orden. De lo contrario
iniciar las acciones y tratamientos adecuados para encaminarse hacia la
prevención.
Las actividades
físicas de tipo aeróbico con una duración de entre 30 y 40 minutos, unas 3
veces por semana es lo que indican los profesionales para mantener un ritmo de
vida saludable, acompañándolo con una sana alimentación.
El médico
cardiólogo Carlos Ceccotaro, hace hincapié en la necesidad de que las
instituciones escolares se sumen a esta pauta, dedicando mayor cantidad de
horas a la actividad física como se hacía antiguamente, al menos designando 3
días semanales para realizarlas.
De acuerdo a la
concepción del doctor Ceccotaro “La vida es un tren que va desde la niñez hasta
la adolescencia, si una persona se sube a ese tren en la infancia con
hipertensión y obesidad, lo más probable es que llegue a la adultez con algún
evento cardiovascular”
Recordemos que
de acuerdo a las estadísticas, la principal causa de muerte en la Argentina y
en todo el mundo, es la enfermedad cardiovascular, el infarto de miocardio y
los accidentes cerebro vascular.
Lo más
importante, según los médicos cardiólogos, es concientizar por medio de todas
las entidades, ya sean médicas, escolares y sociales para evitar este tipo de
enfermedades en la edad adulta.
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